Madrid, 2 de enero de 2024. El Grupo de Puebla está alarmado ante unas reformas presentadas por el presidente Milei en Argentina que suponen una radical apuesta en favor de la verdad, la racionalidad, la libertad y el respeto al patrimonio y al trabajo de los argentinos, saqueados durante lustros por un kirchnerismo tan insaciable en sus abusos como fracasado en sus resultados. Todo ello apoyado por la multinacional del narco socialismo: el propio Grupo de Puebla, el Foro de São Paulo y la Internacional Progresista.
En un comunicado firmado, entre otros por Alberto Fernández, José Luis Rodríguez Zapatero o de Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela y hermano de Delcy Rodríguez, tan íntimamente ligada al gobierno de Pedro Sánchez y celebérrima por sus maletas de contenido desconocido que entran en España sin control ninguno. Signatarios que son máximos exponentes de la ruina de las naciones, de la corrupción política y de la liquidación de derechos y libertades, en aras de una ideología criminal.
El Grupo de Puebla jamás ha tenido semejantes preocupaciones sobre regímenes como los de Cuba, Bolivia, Nicaragua y Venezuela, en los que la democracia y los más mínimos derechos no existen y que son miembros destacados de esta siniestra alianza de fuerzas de cinismo y corrupción.
En estos días, los miembros del Grupo de Puebla y el Foro de São Paulo han vuelto a mostrar su auténtica catadura: Daniel Ortega ha encarcelado sacerdotes; los tribunales bolivianos han vuelto a condenar a Jeanine Añez y a Luis Fernando Camacho; el régimen castro comunista en Cuba ha multiplicado las medidas de represión y de asfixia total al pueblo; y el régimen venezolano mantiene a más de 300 prisioneros políticos, muchos con secuelas de bárbaras torturas, inhabilitada a la ganadora de las primarias, María Corina Machado, y postrada a la población en una situación de hambre, necesidad y terror.
Lo que preocupa y lo que temen el Grupo de Puebla, el Foro de São Paulo y la Internacional Progresista, es el gran éxito de la alternativa de libertad, democracia y prosperidad, enarbolada por el presidente Javier Milei y las fuerzas que representan el sentido común y que aspiran en todo Occidente a la reconquista de los espacios de libertad, sin compromisos, pactos ni concesiones frente a la deriva totalitaria del socialismo allá donde ejerce su implacable degradación empobrecedora y liberticida.